Una persona con problemas de adicción afecta significativamente, con o sin intención, a todo su entorno. Este tipo de problema no solo afecta a la salud de uno mismo, sino también a todo el círculo social de amigos y familiares que conviven en su mismo entorno.
Los familiares y amigos más cercanos pueden experimentar en cualquier momento sentimientos como la ansiedad, el estrés, la depresión, culpa, etc. generando un ambiente de constante toxicidad que cada vez va a peor.
Es de vital importancia que los allegados busquen ayuda y apoyo profesional si sienten que esa situación les sobrepasa o, simplemente si necesitan consultar con alguien cuál es la mejor forma para prestar ayuda a la persona que sufre de la adicción.
Para ello, el asesoramiento y la terapia pueden ser un comienzo seguro para poder recorrer este camino de la forma más saludable posible.
¿Cómo convivir con alguien que sufre de problemas con las adicciones?
Acompañar a una persona durante su proceso de recuperación es duro. Normalmente no se está preparado para prestar apoyo en una situación como esta por lo que, para empezar, podemos enumerar las principales acciones que puedes llevar a cabo si te encuentras en esta situación:
- Aprende sobre la adicción: Entender cómo funciona la adicción, los síntomas y como poder actuar ante las diversas situaciones que se puedan dar durante el proceso, te dará una mayor perspectiva de la situación, para ello, en nuestro centro, ofrecemos terapias a familiares y atención personalizada para el entorno del paciente.
- Ofrece tu apoyo: el apoyo emocional puede ser muy útil para poder ayudar a la persona afectada, es importante no juzgar sus comportamientos y entender que es una persona enferma, con lo cual, su visión de la realidad está deteriorada y distorsionada por el trastorno, no intentes comprenderle en profundidad, sólo acompáñale a buscar ayuda profesional y específica para tratar su adicción.
- Establece límites claros y hazle saber lo que estás dispuest@ a tolerar y lo que no, expresa tus límites de forma respetuosa pero firme.
¿Cuál es el origen de la adicción?
La adicción es un trastorno complejo, que puede ser causado por diversos factores. Como en todas las enfermedades, existen diversos factores de riesgo, pero ninguno de ellos es predeterminante, en la mayoría de los casos se suelen dar todos estos factores, o casi todos:
- Factores biológicos: La genética puede predisponer a una persona a tener una mayor probabilidad de desarrollar adicción, ya que ciertas variantes genéticas pueden afectar la forma en que el cerebro procesa la dopamina. Además, las drogas pueden alterar la función del cerebro, lo que provoca que determinado porcentaje de personas, desarrollen el trastorno.
- Factores psicológicos y emocionales: Baja autoestima, miedos, fobias, alteraciones en la conducta, problemas de salud mental, estados depresivos, etc.
- Factores sociales: El entorno social en el que una persona vive también tiene un papel importante en la adicción ya que vivimos en una sociedad donde el consumo de sustancias tanto legales como ilegales, está normalizado.
¿Cómo podemos reconocer la manipulación de un adicto?
A menudo, las personas con problemas de adicción son expertos en manipular a sus seres queridos y/o cercanos para obtener lo que quieren, algunas de esas señales son:
- Huyen ante el conflicto, no escuchan y justifican constantemente su comportamiento nocivo.
- Atacan a quien les muestra el conflicto o la realidad, culpando y responsabilizando a todo el mundo. “el problema me lo generas/áis tú/vosotros!”
- Se victimizan de todo lo que sucede para justificar el consumo o la conducta.
- Mienten y justifican constantemente todo el tiempo.
- Exageran problemas que son minúsculos, o al contrario, minimizan las cosas importantes.
- A veces, pueden llegar a autolesionarse y amenazan con hacerlo para conseguir sus fines.
Ante estas conductas, lo mejor es no confrontar al paciente directamente, ya que lo único que generamos es potenciar el conflicto y alejarlo aún más, de hecho el paciente ante la confrontación, suele contactar con la culpa, lo que le genera aún más malestar, ante estas conductas lo mejor es solicitar ayuda profesional.
¿Cómo fomentar conciencia de la necesidad de un tratamiento?
Tratar a un adicto es un proceso difícil y complejo, el primer paso es aceptar que hay un problema, y el segundo solicitar ayuda profesional específica, y recalcamos la palabra específica, porque con un tratamiento psiquiátrico o psicológico convencional, no es suficiente, la adicción requiere de un tratamiento específico que es multidisciplinar.
- Lo primero es ayudar al paciente a reconocer que tiene un problema.
En vez de criticar o recriminar las cosas que hace, hagámoslo al revés, reconozcamos su libertad para consumir o hacer las cosas que hace, validemos su derecho al consumo y centrémonos en analizar las consecuencias del consumo o de su conducta, pongámosle la realidad delante, una y otra vez hasta que el paciente toque fondo y reconozca su problema, este trabajo suele tener mucha efectividad después de algún episodio trágico de consumo, accidentes, desastres económicos, problemas de salud, divorcios, pérdida de empleo, etc. - También funciona lo que nosotros llamamos (amor duro), dado que el/la paciente en muchos casos no es capaz de reconocer el problema, reconozcámoslo nosotros, validemos su derecho a seguir consumiendo o a seguir llevando ese tipo de vida y pongamos el límite, es decir, apartémonos en caso de que el paciente no reconozca el problema, igual que él/la está en su derecho de seguir consumiendo, nosotros estamos en el nuestro de no querer participar de dicho “entierro”.
Ni todos los casos son iguales, ni a todas las personas les funcionan las mismas cosas, en nuestro centro terapéutico nos centramos en analizar personalmente de forma muy humana cada caso y ofrecer la mejor solución para acompañar a los pacientes y sus familias, hacia la salud y el bienestar.